LA LITERATURA POSTERIOR A LA GUERRA CIVIL



              CONTEXTO HISTÓRICO-POLÍTICO, SOCIAL Y CULTURAL

           La Guerra Civil tendrá lugar entre 1936-1939, año en que comienza la Dictadura de Franco, que durará hasta 1975. Los primeros años de la posguerra (años 40) serán muy duros, y estarán marcados por el hambre, la miseria, la fuerte represión política, los odios, la censura severísima y el aislamiento internacional.

Durante los años 50 se inicia una tímida liberalización (que aprovecharán los escritores) y una apertura hacia el exterior (España entra en la ONU en 1955). Se producen los primeros movimientos universitarios y obreros.

         Los años 60 están marcados por el desarrollo económico (auge de la industria y el turismo) y el crecimiento de la oposición al régimen.

           Tras la muerte de Franco en noviembre de 1975, se inicia el proceso de “transición” a un régimen democrático.

           En el ámbito cultural, hay que destacar
    - la influencia del Existencialismo, corriente filosófica que ve al hombre como un ser condenado a la existencia (y por tanto a la muerte) y condenado a ser libre (porque en nuestra vida nos vemos continuamente obligados a elegir), lo cual provoca la “angustia existencial”. El máximo representante del Existencialismo es el filósofo y escritor francés Jean Paul Sartre.
    - la influencia de la literatura europea y norteamericana (Joyce, Camus, Beckett, Faulkner), sobre todo a partir de los años 50.
    - la influencia del cine sobre la literatura.

           LA LITERATURA EN EL EXILIO

     Tras la guerra, muchos autores tuvieron que exiliarse (marcharse de España), dispersándose por Europa y América. La literatura del exilio es, sobre todo, una literatura de individualidades y no de movimientos, aunque prácticamente todos los autores mostraron una común preocupación por las circunstancias históricas, políticas y sociales de España, así como la nostalgia de la patria perdida.

          Entre los autores españoles del exilio destacan:
    - en poesía: Juan Ramón Jiménez, León Felipe y los autores del 27.
    - en novela: Francisco Ayala, Max Aub y Ramón J. Sender.
    - en teatro: Max Aub y Alejandro Casona.

           LA LITERATURA ESPAÑOLA DE LOS AÑOS 40: LITERATURA EXISTENCIAL
          Se caracterizó por el aislamiento y la ruptura con el pasado literario más inmediato. La fuerte censura impedía conocer la obra de autores extranjeros, así como tratar en España el tema social.

POESÍA: Hubo dos tendencias:
    - poesía “arraigada”, al margen de la realidad, caracterizada por la vuelta a las formas clásicas, por el tono sereno y equilibrado, y por el tratamiento tradicional de los temas (el amor, la religión, el paisaje, la patria, la familia...). En definitiva, ésta es la poesía de los que se sentían a gusto con la situación política y social. Algunos de estos poetas son Luis Rosales, Leopoldo Panero, José García Nieto, Dionisio Ridruejo ... Se les llama también poetas “garcilasistas”, porque publicaban sus versos en la revista Garcilaso.
    - poesía “desarraigada”, de tono existencial y desgarrado, centrada en temas como la angustia ante la existencia, la soledad, la muerte, el silencio de Dios ... Esta poesía es escrita por poetas que no están conformes con la situación política y social, pero que tampoco pueden expresar abiertamente sus opiniones, debido a la censura y a las duras represiones. Por ello, su “protesta” es existencial más que social. Destacan Dámaso Alonso con Hijos de la ira (1944), Victoriano Crémer, Eugenio de Nora, así como los primeros libros de Blas de Otero y Gabriel Celaya.

NOVELA: Las primeras novelas fueron de propaganda y exaltación del bando vencedor. Después siguieron novelas de temática existencial, que mostraban la miseria de la posguerra. Como novelas importantes de este período podemos destacar:
    - La familia de Pascual Duarte (1942), de Camilo José Cela, novela “tremendista” que presenta los aspectos más desagradables y crudos de la realidad.
    - Nada (1945), de Carmen Laforet, novela de temática existencial ambientada en la Barcelona de posguerra. Su tema es el vacío de la vida en el ambiente de la posguerra.
    - La sombra del ciprés es alargada (1947), de Miguel Delibes, cuyos temas son la tristeza, la frustración y la muerte.
TEATRO: Aparte de un teatro conformista y comercial, de humor fácil y sin más pretensiones que entretener al público, podemos destacar:
    - el teatro existencial de Buero Vallejo, que estrena en 1949 Historia de una escalera, obra que supone un profundo cambio en el panorama teatral español.
    - el teatro cómico, en el que destacan Enrique Jardiel Poncela y Miguel Mihura.
          LA LITERATURA EN LOS AÑOS 50: EL REALISMO SOCIAL

         En esta época, coincidiendo con una leve relajación de la censura, la literatura sigue el camino del realismo social. Es una literatura comprometida, que pretende denunciar las injusticias o miserias, que aspira incluso a mejorar el mundo. Esta literatura está escrita en un lenguaje sencillo, pues está dirigida al pueblo, al obrero. En ella es más importante el contenido que la forma, por lo que algunas obras son de poca calidad artística.

POESÍA: Destacan, sobre todo, dos poetas:
    - Blas de Otero: Pido la paz y la palabra.
    - Gabriel Celaya: Cantos iberos. Uno de los poemas de Celaya, titulado “La poesía es un arma cargada de futuro”, es todo un manifiesto de la poesía social.
Los temas que abordan estos autores son el tema de España, la injusticia social, la alienación, el mundo del trabajo, el deseo de libertad...

NOVELA: La novela social trata temas como la dureza de la vida del campo, las relaciones laborales, la sociedad urbana, la despreocupación de la juventud burguesa o la guerra civil y sus efectos sobre niños y adolescentes. Destacan:

    - El camino (1950), de Miguel Delibes, novela de ambiente rural.
    - La colmena (1951), de Camilo José Cela, que retrata la miseria material y espiritual de la sociedad madrileña en la posguerra.
    - Dos días de setiembre (1962), de José Manuel Caballero Bonald, sobre el campo andaluz.
    - Duelo en el paraíso (1955), de Juan Goytisolo, sobre unos niños que juegan a la guerra, con armas de verdad, en plena guerra civil.
    - Primera memoria (1960), de Ana Mª Matute, preciosa historia de amor entre dos adolescentes en los tiempos de la guerra.
TEATRO: Dentro del teatro social destacan Buero Vallejo y Alfonso Sastre, quien en el libro Drama y sociedad expone sus ideas sobre el nuevo teatro.

De Buero Vallejo destacan Hoy es fiesta (1956), Un soñador para un pueblo (1958), El concierto de San Ovidio (1962), El tragaluz (1967) …

De Alfonso Sastre destacan Escuadra hacia la muerte (1953), La mordaza (1954), El pan de todos (1957), etc.

Otros autores importantes son Lauro Olmo, Carlos Muñiz, Martín Recuerda...

LA LITERATURA ESPAÑOLA EN LOS AÑOS 60 Y 70

        En los años 60 se produce un cansancio del realismo social. Además, los escritores se dan cuenta de que los obreros y campesinos no leen poesía ni novela, ni van al teatro; por lo que se decepcionan de su idea de cambiar la sociedad por medio de la literatura.

POESÍA: La poesía de los años 60 puede llamarse “poesía de la experiencia personal”. Su temática se caracteriza por el retorno a lo íntimo: el paso del tiempo, la nostalgia de la infancia, lo familiar, el amor, el erotismo, la amistad, la soledad ... En cuanto al estilo, esta poesía se caracteriza por estar más “trabajada” que la poesía social; los poetas buscan un lenguaje personal, que suele ser cálido y cordial, a veces irónico. En definitiva, en esta época renace el interés por los valores estéticos.

Como poetas, destacan Jaime Gil de Biedma, Ángel González, José Ángel Valente, Francisco Brines, Claudio Rodríguez ...

En 1970 se publica una antología titulada Nueve novísimos poetas españoles, de poetas como Félix de Azúa, Pedro Gimferrer, Guillermo Carnero, Ana Mª Moix, etc. Estos poetas se preocupan sobre todo por el estilo, por la renovación del lenguaje poético; hacen una poesía “experimental” que, en cierto modo, constituye un nuevo vanguardismo.

En cuanto a la temática, encontramos lo personal (amor, erotismo, infancia) junto a lo público (sociedad de consumo, guerra del Vietnam...). Al lado de tonos graves, serios, aparecen tonos frívolos. Sobre todo, muestran su escepticismo ante las posibilidades de la poesía para cambiar el mundo.

NOVELA: A partir de 1960 aparecen síntomas de cansancio del realismo dominante en la novela española. Paralelamente, nuestros novelistas tienen cada vez más en cuenta las aportaciones de los grandes novelistas extranjeros: monólogo interior, saltos en el tiempo, lenguajes de otros ámbitos, digresiones...

Tiempo de silencio (1962), de Luis Martín Santos, es la obra que inicia esta nueva etapa. Otras novelas importantes son Cinco horas con Mario, de Miguel Delibes; Últimas tardes con Teresa, de Juan Marsé; Señas de identidad, de Juan Goytisolo; La saga/fuga deJ.B., de Torrente Ballester; Volverás a Región, de Juan Benet, etc.

En los años 70 continúa la búsqueda de nuevas formas de narrar, llevando muy lejos el experimentalismo (la novela está cada vez más lejos del realismo). Esto hizo que algunos autores se sintieran desconcertados e incluso retomaran ciertos aspectos de la novela tradicional (por ejemplo, vuelve el “placer de contar” una historia). Algunos novelistas de los años 70 son Luis Goytisolo, José Mª Guelbenzu y Eduardo Mendoza.

TEATRO: Durante los años 60 se sigue escribiendo teatro realista y social. Pero, hacia 1970, otros dramaturgos se lanzan a la renovación del teatro, superando el realismo y asimilando corrientes experimentales del teatro extranjero (teatro del absurdo; teatro épico de Bertold Brecht). Los temas siguen siendo prácticamente los mismos (la dictadura, la falta de libertad, la injusticia...), pero se tratan de forma diferente: el enfoque realista se sustituye por enfoques simbólicos o alegóricos; los personajes suelen ser símbolos (el dictador, el oprimido...); se deforma la realidad, etc.

Casi todos los representantes de este teatro (Alberto Miralles, Diego Salvador, Martínez Mediero, Fernando Arrabal...) se enfrentaron con un camino difícil, pues sus novedades formales alejaban estas obras de las salas comerciales.

También es preciso hablar del papel ejercido por los grupos de teatro independiente (que actúan al margen del teatro comercial). La renovación teatral sería inexplicable sin la labor de grupos como Los Goliardos, o Tábano (Madrid); el Teatro Lebrijano o La Cuadra (Andalucía), Akelarre (Bilbao), ElsJoglars o La fura dels baus (Cataluña).


LA LITERATURA ESPAÑOLA EN LOS AÑOS 80 Y 90
POESÍA: En los años 80 destaca la poesía del grupo granadino “La otra sentimentalidad”, encabezado por el poeta Luis García Montero. Estos autores escriben una poesía intimista y a la vez realista, rechazando el vanguardismo.

Por otra parte, en la década de los 90 destaca una corriente denominada
órfica” (o “poesía del fragmento”), que se caracteriza por su dificultad formal y por la búsqueda de un nuevo lenguaje, alejándose así de la expresión realista.

NOVELA: Se pueden distinguir tres tendencias:

- Novela experimental, que ha ido decayendo paulatinamente.

- Novelistas que se dan cuenta de que ya no se puede innovar más en el campo de la narrativa, y vuelven a formas tradicionales de narrar, destacando la novela intimista (Julio Llamazares, Javier Marías).

- Novelistas que parodian los géneros tradicionales, como Eduardo Mendoza, que en “El misterio de la cripta embrujada” (1978) y “El laberinto de las aceitunas” (1982) parodia el género detectivesco.

TEATRO: Destacan dos corrientes:

- Un teatro realista (aunque no necesariamente en la puesta en escena). Un autor de esta tendencia es Juan Mayorgas.

- Un teatro más vanguardista e innovador (por ejemplo, el de Els Joglars).

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